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Empezar ya en estos días a "guardarlo" en el corazón.
Empezar a agradecer desde el minuto uno;
El pan de cada día.
La amistad y tanto amor recibido.
Los trabajos y desvelos.
La fuerza para caer y levantarnos.
Los rostros nuevos que han entrado y seguirán haciendo pasó en nuestra vida.
Las oportunidades que hemos tenido de tender la mano...y ¡tantas manos que nos han tendido!
La mano de Dios, siempre ahí, siempre en el tiempo oportuno.
Los proyectos que nos han cogido la ilusión y el corazón.
El grupo, los amigos, la familia, los compañeros/as, el camino de cada día con otros.
La Palabra ahí, regalada, cada día...
El sufrimiento de la gente que nos saca de nosotros mismos/as...
Sí, empezar ya a agradecer todas y cada una de las oportunidades, descubrimientos, situaciones que nos hace pasar por la vida, sintiendo y lo más importante viviendo.
¿Cómo vivimos? ¿Qué nos hace falta para vivir?
Sabemos apreciar y agradecer lo realmente importante…
El nuevo curso, está aquí...en breve va tomar parte en la rutina en nuestras vidas.
Pero que mejor manera de comenzar esté nuevo camino, que agradeciendo lo que nos traiga.
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